Cada vez damos más importancia a nuestro bienestar, especialmente en el actual contexto de pandemia que sufrimos desde hace más de un año. Llevar un reloj inteligente, una pulsera o cualquier otro dispositivo que monitoriza nuestro estado de salud es ya algo habitual, y eso se refleja en las cifras de ventas de wearables en todo el mundo. 

Según un informe elaborado por la consultora tecnológica Gartner, si el pasado año este sector generó unos ingresos de casi 69.000 millones de dólares, durante el periodo actual la cifra podría llegar casi a los 81.500 millones, y acercarse a los 94.000 en 2022. Se trata de cifras de vértigo que dan una muestra del creciente interés que suscita este mercado en todo el planeta.

A pesar de que los smartwatches son los líderes indiscutibles de este particular ranking de ventas, con permiso de los auriculares inalámbricos, destaca la evolución que han experimentado los parches inteligentes, que se utilizan para medir la temperatura corporal, la frecuencia cardiaca, el azúcar en sangre y otros signos vitales. 

Tal y como indica el informe de Gartner, este subsector generó unas ventas de casi 4.700 millones de dólares en 2020, y las cifras estimadas para el año actual ascenderán a los 6.000 millones. 

Según explica la propia consultora, la transición acelerada hacia la ‘salud electrónica’, especialmente durante la era COVID, ha empezado a transformar la percepción de los usuarios sobre el control automatizado de la salud, y este hecho se traducirá en una mayor demanda de este tipo de wearables.

Sin embargo, cada vez existen más modelos en el mercado, cada uno con características similares, y no todos son tan útiles ni sirven al propósito del cuidado de la salud que anuncian. 

Por ello, ¿qué elementos debemos tener en cuenta a la hora de elegir nuestros wearables?.

Primer factor a tener en cuenta: Regulación e investigación.

Lo primero en lo que debemos fijarnos a la hora de elegir un weareable es que esté aprobado por las autoridades encargadas de su regulación, como la FDA americana, y que cumpla la legislación europea de protección de datos o las legislaciones estatales que regulan este tipo de dispositivos. 

En algunas ocasiones se puede suplir la ausencia de regulación específica por parte de las autoridades sanitarias de un país con el aval y los estudios que ofrecen los grandes fabricantes. Todo depende del grado de confianza que ofrezca la marca. Por ejemplo, la empresa francesa Withings ofrece en su página web las investigaciones y los resultados de los estudios a los que se han sometido algunos de sus dispositivos. 

Segunda clave: chequea sus características técnicas.

Antes de lanzarte a comprar una pulsera o un reloj inteligentes debes pensar para qué los quieres y qué tipo de información quieres que monitoricen. 

Por lo general, debes desconfiar de todos los dispositivos que prometen decenas de funciones porque, probablemente, ninguna funcionará de forma apropiada. 

Es conveniente que compruebes sus características técnicas y que las chequees a través de internet para saber si cumplen la función que están llamadas a realizar. Debes decidir si quieres que monitorice el ritmo cardiaco las 24 horas, que lleve GPS integrado, tenga análisis del sueño, respiración guiada, alertas de mensajes y llamadas, conectividad con apps, reproducción de música… Además, presta atención a la duración de la batería con y sin el GPS activado y su tiempo de carga.

Tercer paso: ¿Tiene una buena experiencia de usuario?.

Aunque pueda parecer una obviedad, en ocasiones las mejores recomendaciones no se encuentran en revistas especializadas sino en las redes sociales y en los canales que utilizan los usuarios para dar a conocer sus respectivas experiencias. 

Aunque pueda parecer una obviedad, en ocasiones las mejores recomendaciones no se encuentran en revistas especializadas sino en las redes sociales y en los canales que utilizan los usuarios para dar a conocer sus respectivas experiencias. 

Si dedicas algo de tiempo a comprobar estas opiniones podrás encontrar el wearable que mejor se adapte a tus necesidades. 

Dentro de este apartado es conveniente que intentes ver cómo funciona el departamento de atención al cliente, especialmente a través de las respuestas que dan los desarrolladores a los usuarios que escriben quejas en las tiendas de Android y Apple.

Último factor: comprobar su compatibilidad y usabilidad.

Uno de los aspectos más importantes de cualquier dispositivo de este tipo es su compatibilidad con tu smartphone, y las características de la app, es decir, cómo es la interfaz, qué datos muestra, si permite establecer objetivos personalizables y retos diarios…

Estos cuatro tips te ayudarán a elegir el dispositivo que más se ajuste a tus necesidades, tanto si se trata de un smartwatch como si es una pulsera e-health.