Estilo de vida - 8 Junio, 2020
Salas quirúrgicas multidisciplinares que acogen a varios especialistas médicos. Los quirófanos inteligentes cuentan con todos los avances tecnológicos para realizar pruebas de imagen durante el proceso quirúrgico y comprobar su éxito antes de cerrar la incisión.
Tags: #QuirofanosHibridos, #CirugiaSmart
🕑︎ 2:20 min.
Del cine a la realidad
Quizá el avance de la tecnología nos permita algún día disponer de una cápsula de diagnóstico e intervención quirúrgica como la que salva la vida a Chris Pratt en Passengers, o la que posee cada vivienda en las naves-planeta de la película Elysium. En ambos casos estas cápsulas eran auténticos quirófanos automatizados en los que, con solo pulsar un botón, un conjunto de escáneres y brazos robotizados realizaba un diagnóstico al paciente, restañaba sus heridas y lesiones e incluso conseguía reanimarlo y devolverlo a la vida.
Es evidente que todavía falta (¿mucho?) tiempo para que podamos conseguir un equipo médico plenamente robotizado y autónomo similar al que aparece en ambas películas; sin embargo, la creación de sistemas como el Da Vinci, equipo de cirugía robótica utilizado para múltiples procedimientos quirúrgicos, especialmente en prostatectomías, ya ha demostrado que la presencia de robots en las salas de cirugía ha dejado de ser algo exclusivo del cine de ciencia ficción, y que los quirófanos han empezado a convertirse en espacios inteligentes equipados con las últimas tecnologías en materia sanitaria.
¿Qué son?
Las salas de cirugía inteligentes o quirófanos híbridos se diferencian de los convencionales en que están equipados con los últimos avances tecnológicos para conseguir, no solo realizar intervenciones quirúrgicas con la máxima precisión, sino también sofisticadas pruebas de imagen y diagnósticos de forma simultánea y en tiempo real con el objetivo de aumentar su eficacia. Estas salas cuentan con equipos de última generación que son capaces de ofrecer imágenes de alta calidad en 3D, efectuar tomografías intraoperatorias y realizar resonancias magnéticas en la misma mesa de operaciones, de manera inmediata y sin necesidad de que el paciente tenga que ser desplazado a otra zona hospitalaria. Así se aumenta la eficiencia, la rapidez y el éxito de la intervención, y se optimiza todo el proceso.
Las ventajas que llevan aparejadas estas nuevas salas inteligentes son enormes, pero se pueden resumir en cuatro: por un lado, el uso de estos quirófanos permite realizar un diagnóstico certero y llevar a cabo la intervención quirúrgica sin que se produzcan demoras; resulta menos invasivo, facilita la recuperación de los pacientes y, en resumen, minimiza los riesgos.
Precisión y ventajas para el paciente
Gracias a estas salas inteligentes, los profesionales consiguen una mayor precisión intraoperatoria durante las cirugías porque pueden conseguir imágenes de alta calidad en el mismo momento en que llevan a cabo la intervención y así comprobar su eficacia de manera inmediata. De esta forma se consigue evitar la repetición de pruebas y que el paciente tenga que soportar varios contrastes, y se reduce el tiempo de exposición a las fuentes de radicación. Además, estos quirófanos híbridos están diseñados para facilitar el trabajo simultáneo de varios equipos médicos.
Multidisciplinariedad
Esta es, precisamente, una de las ventajas de este tipo de quirófanos: su carácter multidisciplinar permite acoger a distintos especialistas médicos para que comprueben el éxito de una intervención en el mismo momento en que se completa la cirugía y sin tener que mover al paciente; es decir, un todo-en-uno que permite practicar las pruebas que se necesiten sobre la marcha y concluir el proceso en un solo día, especialmente en cirugías sensibles. Por ejemplo, en una intervención cerebrovascular pueden participar un equipo de neurocirugía y de neurorradiología intervencionista para, por un lado, reparar la zona afectada, y a continuación, realizar una angiografía de control para comprobar su estado antes de cerrar la incisión.
A pesar de que el uso de estos quirófanos estaba indicado originariamente para intervenciones de cirugía cardiovascular, sus aplicaciones se han ampliado al campo de la neurocirugía y a la cirugía de la columna vertebral, y, en el caso de las intervenciones neurológicas y oncológicas, permiten realizar resonancias intraoperatorias en tiempo real.
¿Y los límites? ¿Hasta dónde pueden llegar estas salas quirúrgicas inteligentes? Solo el futuro y la tecnología podrán determinar el alcance y efectividad de estos quirófanos híbridos, aunque, a diferencia de lo que recrean las películas Passengers y Elysium, el ser humano siempre tendrá un papel protagonista.
¿Qué te ha parecido el artículo?